jodOROwsky

Por Oroyelix Lozada

Sabrán unos, otros no; estudio Comunicación Social, mención Periodismo.

De las 7 materias que curso, una de ellas es Periodismo II. En esta oportunidad me asignaron realizar una entrevista vía twitter. ¡Qué cosa más difícil encontrar alguna personalidad venezolana que aceptara! Aunque debo decir que mi primera opción y en quién pensé, desde un principio, no fue precisamente un venezolano. Ya les hablaré de eso.

Pero intenté con Jean Mary, Victor Drija, Román Losinski, Aymara Lorenzo. ¿Quiénes son? Venezolanos; la primera locutora y actriz de teatro. El segundo, cantante y también actor. Las dos últimas personalidades son periodistas, comunicadores del canal de televisión Globovisión.

Mi papá siempre dice que a mariposa se le olvida cuando fue gusano.

Tuve la suerte de contar con la atención de Brontis Jorodowsky. Mi primera opción y fue mi primera respuesta. Agradecida por siempre por sus palabras y amabilidad. 

Aquí comparto lo que redacté, después de realizada la entrevista:

Jorodowsky: “No intento sorprenderte”

Confesó que poco sabe de Venezuela, aunque anhela gozar de una larga vida para así poder tener la oportunidad de conocer a la pequeña Venecia

Sonó el celular de él. Era una mención de twitter.

En ese momento tomaba un café en la terraza del lugar donde vive. Contemplaba los sonidos de la ciudad, apreciaba el silencio y el ruido. Respiraba aire puro. Escuchaba su voz del interior; recordaba una de sus tantas actuaciones.

O posiblemente había llegado a casa de una enérgica presentación. Y agotado, se disponía a descansar; pero antes encendió el computador para revisar sus cuentas y notó una nueva mención. Le proponían una entrevista vía twitter.

Quizás haya sido así. Quizás no. Será difícil saber qué hacía Brontis Jorodowsky. Tal vez arrugó su frente al momento de leer el tweet y le pareció descabellado. O estuvo dispuesto desde el principio. Solo él sabrá.

Las nuevas tecnologías han propiciado cambios. Twitter, en tanto que amplía las posibilidades de comunicarnos con artistas de diferentes categorías, también amputa las formas comunicativas más primitivas como lo es el contacto físico, tono de voz, contacto visual, gestos, proxemia, etc.

El actor plasmó respuestas de más de 140 caracteres que revelaron tan sólo una pizca de lo que es. Actúa desde los 6 años y medio y como auténtico Jorodowsky que es, afirma que sus “intereses no van por segmentos, son como una flor: en su centro la actuación, pero se extienden en todas direcciones”. Cuando actuó siendo tan solo un niño, sus acciones estaban enmarcadas en el descubrimiento y curiosidad; en la búsqueda de precisión.  Sin ningún otro tipo de análisis.

Nació en 1962 en Chile.
 

Jorodowsky abordó las preguntas de manera refinada y bien pensada. Cuestionó preguntas y también ofreció preguntas como respuestas. “¿Qué llamas éxito?”  fue su respuesta al preguntarle cuál era la clave para conseguirlo. Hombre de gran virtud como lo es la sencillez. Y quedó manifestado al responder que aceptar la entrevista era algo que lo hacía feliz. Además de eso, agradecido; alguna vez escribió: "Gracias a ti que me sigues, me impulsas a avanzar".

Linaje  Jorodowsky

Quienes siguen a Alejandro Jorodowsky por su trabajo, se preguntarán cuál será la receta para contar con tanto talento y creatividad en su linaje. Sin duda alguna deja un gran legado a todos sus hijos. Y es ahí cuando surge la pregunta “¿Qué le debe Brontis a su padre?”. Mejor que cualquier interpretación, son sus propias palabras: “¿Qué le debe un eslabón al eslabón anterior y qué le deberá el eslabón siguiente de esta cadena que fue de plomo y está en camino, primero a ser de oro y luego rayo de luz?”.

Brontis Jorodowsky es hijo de Alejandro, el creador de la psicomagia y la psicogenealogía. Aunque existen posiciones encontradas con respecto al tema; Brontis, por su parte, considera que la psicomagia puede ser útil para algunos y cuando es bien recetada resulta ser una terapia divertida.

Sutil despedida

Concede segundas oportunidades solo a quien reconoce su error y no lo repite. Anhela poder desarrollar todas sus capacidades emocionales, mentales y corporales. A su juicio la evolución de la especie humana apenas va en ascenso, por ello debe apostar por más porque “no es posible que estemos aquí para seguir así”.

En ese momento, le entristeció que el cansancio de media noche haya puesto punto y final al encuentro virtual. ¡Tristeza compartida, señor Jorodowsky!

Entonces, cerró la computadora y se fue a la cama. ¿Habrá ocurrido así? Sólo él sabrá.